En busca de la Razón | David Razo

Con certeza puedo decir que México es un país donde la inclusión es vulnerada. ¿Por qué? Porque he sido víctima de ello.

Como lo menciona la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad de las Naciones Unidas:
“Las personas con discapacidades incluyen a aquellas que tengan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales (como de audición o visión) a largo plazo que, al interactuar con diversas barreras, puedan impedir su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con los demás”.
El tener una discapacidad no debe considerarse como una marca; esto no significa que se les tenga que hacer a un lado o apartarlas. O peor aún, discriminar.
Como padre de una hermosa princesa con autismo, conozco de primera mano como la inclusión hace falta. Además, de que muchas veces las personas con discapacidad son excluidas.
México no tiene la educación adecuada ni las políticas correctas para fomentar una verdadera inclusión.
Con decepción puedo decir que en México la discriminación existe y a niveles alarmantes.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México, realizada en 2017 por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, el grupo más discriminado es el de personas con discapacidad, seguido de las personas indígenas.
Y, respecto a la negación de sus derechos, ocupa el segundo lugar como el grupo más vulnerado. El primero lo ocupan las trabajadoras del hogar.
Hablando de negación de derechos, esto tiene que ver con el no recibir:
- Atención médica o medicamentos;
- Atención o servicios de alguna oficina de gobierno;
- Entrada o permanencia en algún negocio, centro comercial o banco;
- Recibimiento de apoyos por programas sociales;
- La oportunidad de estudiar o seguir estudiando;
- Facilidad para obtener un trabajo o bien, recibir un ascenso;
- Obtener un préstamo o tarjeta;
- Entre otras cosas que quizás otra persona pueda adquirir con mayor facilidad.

Son más cosas de lo que se podría imaginar, ¿Verdad? Por ello me preocupa tanto el hecho de no haber una verdadera inclusión.
Por eso se debe de implementar; por el futuro de todos, hablando como un México unido y solidario.
En ese mismo informe, se dice que las principales problemáticas que se presentan por la discapacidad es el no contar con calles, instalaciones y transportes que se adecuen a la discapacidad que presentan; así como la evidente falta de oportunidad para encontrar un empleo.
Sí, es una realidad que México es un país de discriminación y racismo, pero eso debe de cambiar. Por el bien de todos los grupos que están siendo vulnerados.
No hay que minimizar las oportunidades a las que cualquier persona pueda tener acceso.
Esto es empezar por la parte de las personas con discapacidad, pero por qué no que esto sea solo el principio, la punta del iceberg.
Pero por algo se debe comenzar y qué mejor que hacerlo por algo de suma importancia. Debemos hacer notar el cambio.
Como alguien que ha vivido de cerca estos conflictos, sé qué es lo que se debe de cambiar y, sobre todo, sé cómo hacerlo.
Basta de un México donde sus líderes no se preocupan por el pueblo… por TODO el pueblo.
Como ciudadano, como hombre, esposo y padre, estoy en busca de hacer una verdadera acción por México.
Estoy harto de solo esperar, de ser alguien pasivo, por eso me he decidido levantar para hacer un cambio dentro de mis posibilidades.
Por eso, este 6 de junio te pido con el corazón en la mano que hagas un voto RAZONADO. Un voto de fe, pero no de una fe ciega, porque mi labor es real; mi fin es ayudar a todos de forma desinteresada y para poder hacer más, necesito de tu apoyo.
Vota por PES; Vota por David Razo, diputado al distrito 3.
